No, este no es el nuevo juguete teledirigido de Bandai, es el Orvillecopter, la última obra del artista Holandés Bart Jansen. Al parecer el hombre no superó el atropello mortal que sufrió su gato y decidió rendirle tributo devolviéndolo a la vida en forma de juguete volador. Una idea un tanto oscura, pero que está siendo tema de conversación entre artistas y aficionados al aeromodelismo dando a conocer el nombre de este artista y probablemente siendo la promoción más efectiva para el resto de sus obras.
Estamos seguros que "kittie", si aún viviera con nosotros, estaría orgulloso de formar parte de la exposición de su dueño, pero quizás de una forma menos macabra que volando por la sala con esta cara de velocidad. Si te ha gustado la idea o estas en busca de un regalo original para tu sobrino, echa un vistazo al vuelo del Orvillecopter en el vídeo que te dejamos abajo. "Abuelas, no quiten ojo a sus minínos"
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